«La recolección de datos científicos hoy en día frecuentemente se realiza con instrumentos electrónicos que representan los “datos crudos de observación” en un formato que es esencialmente numérico en origen. Así es en el caso de la astrofísica, donde los telescopios con instrumental electrónico van conquistando nuevos rincones del universo, produciendo enormes cantidades de datos numéricos para ser procesados. Sin embargo, a la inversa de épocas anteriores cuando las imágenes astronómicas servían para obtener mediciones en formato numérico, hoy en día son las diversas imágenes “cuasi-fotográficas” de los objetos astronómicos observados las que son producidas a base de datos numéricos. Estas “imágenes hechas de números” tienen un protagonismo central tanto en las publicaciones académicas como en textos de divulgación científica (como por ejemplo en el caso de “la primera fotografía de un agujero negro” difundida en abril 2019). Las siguientes preguntas son generalizables más allá del caso de la astrofísica: ¿Qué funciones desempeñan estas imágenes en la práctica científica? ¿Qué rol específico juegan las mismas en distintos momentos del proceso de la investigación, en la argumentación y en la comunicación de los resultados científicos? En definitiva: ¿Qué utilidad tiene seguir produciendo imágenes científicas a partir de datos numéricos?»
«Piroska Csúri es doctora en Lingüística y Ciencias Cognitivas (Brandeis University, EE.UU.), Magíster en Matemática y en Lengua y Literatura Inglesa (Universidad de Szeged, Hungría). Es docente e investigadora de la Universidad Nacional de Lanús, profesora de cátedra de la Universidad de San Andrés y dicta clases de posgrado en la Universidad de Buenos Aires/FADU.».